El proyecto aborda la construcción de un complejo de catorce viviendas, distribuidas en un área de 3.900 m2 en en La Colonia, Junín, provincia de Mendoza. Si bien todas las viviendas tienen su acceso vehicular garantizado desde la calle principal del loteo, también se plantea vincularlas entre ellas  mediante la inserción de un sistema peatonal de calidad, conformado por un sendero paralelo a la calle y tres placitas de dimensiones acotadas que lo unen con la calle principal. En esas plazas es dónde se establece la posibilidad de habilitar pequeños comercios que nutran al complejo de viviendas y a las futuras construcciones del área, dotando al emprendimiento de entidad propia y una identidad definida y diferente.

 

Encontramos tres variaciones de vivienda (y sus opciones simétricas), en función de su ubicación dentro del conjunto para que  siempre se garantice la galería en doble altura en la orientación más favorable posible. Los otros espacios principales de la vivienda se ubican a su alrededor.  En la planta superior se plantea una terraza abierta según orientación y vistas, vinculada con el doble espacio de la galería, generando una unidad espacial en corte que potencia la vivencia de esos espacios. Si bien se plantean tres tipos, las viviendas tienen todas las mismas características: galería, estar, comedor, cocina, toilette de cortesía y recibidor en la planta baja; dos habitaciones, baño completo, terraza y doble altura de la galería en la planta superior. La superficie cubierta construida es de 105 m2, 14 m2 de galería y 12 m2 de terraza en cada una de las viviendas. La materialidad apela directamente al contexto. Muros de obra vista de ladrillón mendocino garantizan la inserción del conjunto en el imaginario del territorio, un envejecimiento digno y un bajo costo de mantenimiento. Carpinterías de madera clara dotan a la vivienda de calidad material y visual. Interiores blancos, pisos de cemento alisado, losas de hormigón visto completan el volumen en su interior.

 

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